San José, Costa Rica
Por: Redacción Costa Rica Mayor
16 de septiembre de 2025
Una nueva investigación ayuda a entender por qué algunas personas llegan a los 100 años… ¡y aún tienen defensas como si fueran jóvenes!
Un estudio publicado en la reconocida revista eBioMedicine reveló algo sorprendente: el sistema inmunológico de algunas personas centenarias no solo se mantiene activo, sino que está mejor preparado para defenderse que el de muchas personas más jóvenes.
Esto podría cambiar la forma en que entendemos el envejecimiento y dar nuevas ideas para crear vacunas, tratamientos o formas de cuidarnos mejor a medida que cumplimos más años.
¿Qué hizo este estudio?
Un grupo de científicos comparó la sangre de tres tipos de personas:
-
Personas centenarias sanas (de más de 100 años)
-
Hijos de estas personas (ya adultos mayores también)
-
Personas más jóvenes de la comunidad
El estudio se hizo en China y Japón, y se utilizaron tecnologías modernas para observar las células del sistema inmune una por una. Lo que buscaban era entender qué hace diferente a quienes envejecen tan bien.
¿Y qué encontraron?
Los centenarios tienen un sistema inmune más simple, pero más fuerte. Te lo explicamos fácil:
✅ Tienen menos células que “ayudan” y más células que “atacan”: es decir, menos defensa pasiva y más defensa activa contra virus o células dañinas.
✅ Sus células “asesinas naturales” (llamadas NK) se ven jóvenes, se comunican mejor con otras células y responden rápido ante las amenazas.
✅ Tienen un gen llamado RUNX3 más activo, que ayuda a que estas células atacantes funcionen mejor.
✅ Sus defensas trabajan en equipo: las células se comunican entre sí de manera más eficaz, lo que permite detectar y eliminar problemas más rápidamente, sin generar inflamación innecesaria.
¿Y esto para qué nos sirve?
Si entendemos cómo estas personas logran mantener su sistema inmune en forma, podemos diseñar:
-
Vacunas más efectivas para personas mayores
-
Tratamientos que mantengan activas nuestras defensas con el paso del tiempo
-
Formas de vivir que promuevan un envejecimiento sano, sin depender solo de la suerte genética
Envejecer bien es posible… y la ciencia lo confirma
Este estudio demuestra que no todo en la vejez es pérdida. El cuerpo puede reorganizarse, simplificarse y seguir funcionando muy bien. Y si aprendemos de las personas centenarias, podríamos aplicar esas lecciones en nuestra vida diaria o en las políticas públicas.
📌 En Costa Rica, donde cada vez hay más personas mayores, investigaciones como esta pueden inspirar nuevas campañas de salud, programas comunitarios y una visión más positiva del envejecimiento.